La disciplina hace el maestro








La gente que me conoce sabe que soy una persona disciplinada. A veces más de lo que yo mismo quisiera; sin embargo, creo firmemente, que ha sido la disciplina la que me ha dejado poder crear lo que hasta ahora he podido hacer.


Son esos pequeños y grandes detalles de la orientación y educación oriental que me han dejado ir más allá de lo que muchos se permiten hacer.

Pero ¿qué es la disciplina? Su significado no es tan espeluznante como algunos creen, quiere decir “enseñanza o educación”; y aunque posiblemente viene del latín discipulus la idea es enseñar un orden necesario para poder llevar a cabo un aprendizaje.

Pero ¿por qué no pasan las cosas como se planearon? Porque resulta que muchas de las veces no se planearon, se hicieron “como salieran” y entonces salieron así, “sin chiste”.

La disciplina permite hacer un programa de qué quiero y cómo lo quiero, a través de pasos sistematizados y ordenados dependiendo las capacidades de cada uno se van haciendo cada día mejor las cosas. Cuando tienes un plan, hazlo en papel, planea las cosas que necesitas, y por qué las necesitas, aprende. Desafortunadamente no nos enseñan a poder distinguir las cosas importantes y las cosas urgentes, y por eso no somos disciplinados.

Aprendí con el tiempo que debía poner prioridades en el camino, tiempos para cosas personales, tareas, ingresos, familia, ocio y hasta “pérdidas de tiempo”, cosa que muchos no hacen y ni tienen idea que hacen.

Disciplina, es algo que debemos tener, ¿cuánto tiempo ocupas en lo que quieres hacer? ¿Cuánto en ti? ¿En tú familia? ¿En tus estudios? ¿En el proyecto?

Existen distractores muy fuertes, como el ruido, los amigos, la familia, la falta económica, etcétera, pero con una buena disciplina y orden puedes lograr hacer que tu sueño se realice. Te daré unos tips para comenzar a disciplinarte:

1.    Busca lo que quieres lograr. Te propondría hacer un plan a uno, tres y cinco años con metas alcanzables. También te diría que no bases tus planes en “todas tus ganancias”, sino en el crecimiento, al final si está bien, el dinero llegará a su tiempo.

2.    Analiza cuáles son los distractores. Desde el mismo ruido, hasta la falta económica, busca todo aquello que puede distraerte de tu meta.

3.    Ponle orden, disciplina, hacer diez cosas al mismo tiempo hará que en realidad no realices ninguna bien.

4.    Comienza a disciplinarte. Cada mañana toma tu lista, analiza lo que necesitas para lograr el objetivo, busca cómo realizarlo HOY, no mañana y menos ayer, HOY.

5.    Disciplínate. Compra libros de lo que quieres hacer, lee autores que ya hayan pasado por eso y ve cómo le hicieron, infórmate.



La fórmula está en creer y en crear, en no rendirse y dejar a un lado el miedo, o vivir con él, pero enfrentándolo cada día. No será fácil al principio, pero con el tiempo tomarás experiencia y harás esas listas en un santiamén, sólo basta que te animes a creer y a crear y en ese proceso, a disciplinarte.

Un abrazo.

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